Excombatientes, indÃgenas y autoridades firmaron un manifiesto por la paz y la no repetición.
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En el parque principal de Dabeiba, con la cordillera occidental de fondo, quienes hace unos años cargaban armas por los caminos veredales y ancestrales, este sábado ofrecieron su perdón a quién hicieron daño.
Excombatientes de la extinta guerrilla de las Farc, en cabeza de Pastor Alape y Rodrigo Granda, reconocieron a las comunidades indÃgenas Embera, de ese municipio, como vÃctimas del conflicto y pidieron perdón por los hechos violentos.
«Este ritual de perdón implica seguir la cosmogonÃa de sus creencias para poder encontrarnos con el perdón que tiene que manifestarse con acciones en el territorio», contó Alape.
El ritual es un resultado de la iniciativa de las mismas comunidades indÃgenas, quienes buscaron al Partido Farc y, desde noviembre del año 2019, planeaban el encuentro.
Para Leonardo Domicó, dirigente indÃgena en Dabeiba, este acto es la primera puerta que se abre en el camino del reconocimiento de la verdad.
Y como sÃmbolo de reconciliación, los diferentes grupos culturales de Dabeiba, con la presencia de excombatientes, realizaron una muestra de danzas tradicionales para mostrar que en las diferencias se puede convivir.